El balance general es desfavorable en cuestión de higiene y alimento suficiente para los reclusos
Chetumal, . Roo, 20 de diciembre 2018.- El sistema carcelario del Estado alcanzó apenas una calificación promedio de 6, cuatro décimas abajo del año anterior, de acuerdo con el Diagnóstico de Supervisión Penitenciaria 2018, según dio a conocer el ombudsperson estatal, Marco Antonio Toh Euán.
La evaluación, que arrojó resultados mixtos para cada cárcel y en cada rubro analizado, se hizo con base en la aplicación de cédulas de evaluación contenidas en la Guía Nacional de Supervisión Penitenciaria, que permite calificar diversos aspectos de los centros de reclusión, como las áreas jurídicas, médica, educativa, psicología y trabajo social.
También se aplicaron cuestionarios entre la población de internas e internos, a fin de constatar la información proporcionada por las autoridades. En cada centro se calificaron cinco rubros generales de derechos, integrados por varios indicadores. El trabajo se realizó entre el 10 de septiembre y 15 de octubre de este año.
El Centro de Reinserción Social de Chetumal tuvo una calificación aprobatoria, pero con alerta de riesgo, de 6.78, que mejoró en comparación con 2017, ya que se aprobaron cuatro de cinco rubros: condiciones de gobernabilidad, aspectos sobre las garantías a la integridad física y moral, estancia digna y reinserción social.
El aspecto con deficiente desempeño fue el de los grupos de personas privadas de la libertad con requerimientos específicos, especialmente de la población LGBTTTI y de personas con adicciones.
En el caso del Centro de Reinserción Social en Benito Juárez, prevalecen deficiencias en sus condiciones, lo que se refleja en la calificación de 5.55. El aspecto más determinante para ese resultado son las condiciones de gobernabilidad, especialmente por el insuficiente personal de seguridad y custodia. El aspecto mejor evaluado y con calificación aprobatoria fue el derecho a la reinserción social, en razón de la integración y funcionamiento del Consejo Técnico Interdisciplinario.
En Cozumel se observa una desmejora, siendo que el año pasado se encontraba aprobado y como el mejor calificado. La calificación de aprobado pero con alerta de riesgo de 6.47 en 2018 se da por la queja constante sobre las condiciones de alimentación de la población penitenciaria y la inexistente separación entre la población procesada y sentenciada. El mejor desempeño se obtuvo en las condiciones de gobernabilidad.
Para el Centro de Retención Municipal de Playa del Carmen la calificación fue de 6.26, que se mantuvo como aprobatoria, pero con alerta de riesgo, con cuatro rubros por encima de 6 y uno con 5.72 correspondiente a la reinserción social de la persona privada de su libertad.
La Cárcel de Felipe Carrillo Puerto sigue en condiciones reprobatorias por la falta de prevención y atención de incidentes violentos, escasa normatividad que lo rige, inexistente separación de población sentenciada y procesada, de acciones relacionadas con los beneficios de libertad anticipada y la escasa atención a grupos con requerimientos específicos, como el de las personas mayores.
En el diagnóstico general se emitieron las conclusiones pertinentes, destacando que el insuficiente suministro de alimentos, las condiciones materiales y de higiene, el hacinamiento y la sobrepoblación (en Cancún), la gobernabilidad y seguridad, el personal de seguridad y custodia, el tema de la atención a la salud, las actividades laborales y de capacitación, la prevención y tratamiento de la tortura, y la atención de las personas privadas de la libertad con requerimientos específicos, son los puntos más urgentes a atender a fin de garantizar la dignidad humana.
Se hicieron llegar una serie de propuestas a la Secretaría de Seguridad Pública con el fin de que se mejoren dichos centros.
(Infoqroo)
