Recordó que su esposa falleció hace dos años a la edad de 91 y ahora vive con una de sus hijas quien
Kantunilkín, Q. Roo, 23 noviembre 2018.- Es quizás uno de los últimos vínculos de la cultura maya autóctona de Quintana Roo con el presente, pero no parece darse cuenta; vive su vida como la ha vivido en sus 98 años de existencia: trabajando.
Don Emilio Dzib Baak, con un déficit visual notorio, chapea, estando en el umbral de los 100 años, su terreno, lo que hace más como un pasatiempo que como una necesidad de trabajar.
Dzib Bak está todas las tardes en su terreno limpiándolo, retirando desde piedras, vidrios y una que otra hierba que pueda existir utilizando, únicamente, sus manos para tales labores.
“No me he cortado cuando estoy limpiando el terreno, lo más que me ha pasado es haber tocado espinos y, cuando esto sucede, dejo de trabajar un rato hasta que mi mano ya está menor para seguir, porque me fastidia estar acostado en mi hamaca. Si no estoy activo, creo que me podría enfermar”, confesó.
Dzib Bak tiene su vivienda en la calle Guadalupe Victoria esquina con Independencia de esta cabecera, misma que está en malas condiciones, ya que, por su edad, no puede cambiar los huanos viejos y solo alguno de sus nueve hijos suele visitarlo de vez en cuando.
Recordó que su esposa falleció hace dos años a la edad de 91 y ahora vive con una de sus hijas quien, ve por él y por su hábito diario de chapear su terreno, que lo mantiene sano.
