El curso fue abierto y se invitó a algunos jóvenes que ya han cometido una infracción y sus familiares, quienes juegan un papel importante
Cancún, Q. Roo, 5 de febrero 2019 .— Ante la tendencia creciente en el número de infractores administrativos comunes se trabaja en un nuevo Modelo Homologado de Justicia Cívica, con el que se pasaría del modelo actual, meramente punitivo, a uno más restaurador, mas pedagógico y social, que deje el arresto como última medida y privilegie otro tipo de sanciones, manifestó Fabián Gamboa Song, director de Juzgados Cívicos de Benito Juárez.
Con ese modelo, los infractores serían sancionados con trabajo social y medidas para mejorar la convivencia ciudadana, como canalizaciones a Alcohólicos Anónimos, a los Centro de Integración Juvenil, al Servicio Municipal del Empleo. Al mismo tiempo, con el apoyo de psicólogos y trabajadores sociales, trabajaría en la identificación de las causas para qua la sanción vaya de la mano con una solución, explicó.
Según dijo, está comprobado que el arresto, a fin de cuenta, no soluciona muchas cosas y le cuesta al Estado; no ayuda a la prevención y la reincidencia sigue creciendo.
Asimismo, recordó que actualmente el trabajo comunitario es para conmutar el arresto. Después de cierto tiempo y requisitos que marca el Bando de Gobierno, la persona es candidata a un servicio social. Lo que se busca con el Modelo Homologado de Justicia Cívica es que el trabajo social sea directamente una sanción.
Entrevistado para el noticiero matutino de Radio Fórmula, comentó se trabaja en cursos de prevención y se busca el involucramiento de los padres, a fin de reforzar la tarea preventiva.
La semana pasada se impartió el curso “Prevención antes que Corrección”, dirigido a menores en conflicto con la ley, anteriormente denominados menores infractores, jóvenes que cometen una falta administrativa y son puestos a disposición del Juzgado Cívico. Ellos no cumplen arrestos ni pagan multas. Su tratamiento es diferente, pues el Bando de Gobierno permite canalizarlos con sus padres o tutores e, incluso, a una casa de asistencia o a un centro de rehabilitación.
Desafortunadamente, indicó, muchos jóvenes son puestos a disposición del juez cívico por consumo de alcohol o drogas. Por eso, emprendieron la organización de cursos y pláticas de prevención con las que se busca evitar conductas antisociales catalogadas como infracciones al Bando de Gobierno.
El curso fue abierto y se invitó a algunos jóvenes que ya han cometido una infracción y sus familiares, quienes juegan un papel importante en esta situación, debido a que los jóvenes muchas veces cometen faltas administrativas, como el consumo de alcohol en la vía pública, de drogas o pandillerismo, por problemas familiares o desatención de los propios padres.
El curso ya se impartió dos veces en el Juzgado Cívico del Centro de Retención y Sanciones Administrativas y ya se preparan dos más para marzo, a los que se invitará a jóvenes de escuelas.