En vista del daño a la imagen turística de Quintana Roo, vale la pena analizar su derogación, afirma David Ortiz Mena.
Tulum.- Por la falta de mecanismos eficientes de cobro y fiscalización, por la falta de una contraprestación clara para turistas y, principalmente, por la mala imagen que le deja a los destinos de Quintana Roo, es hora de que el Congreso del Estado se plantee seriamente la derogación del llamado “Visitax”, declaró David Ortiz Mena, presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum.
En entrevista, el representante hotelero destacó que se pretende cobrar este derecho por el uso de infraestructura pública a turistas extranjeros cuando van de salida, pero si ellos no lo pagan, no hay consecuencia alguna. Pese a ello, se generan situaciones de incertidumbre, de quienes no saben si deben pagarlo, pues les dicen que tendrán problemas si regresan a Quintana Roo, lo que no es cierto.
“No podemos dejar lo más, por lo menos”, comentó el empresario tulumnense, quien recordó que este cobro fue incluido en 2021 para cubrir las insuficiencias presupuestales causadas por la pandemia del COVID-19, pero desde su origen quedó mal planteado y así quedó en la ley.
De por sí, un extranjero que visita Quintana Roo debe pagar una serie de impuestos o derechos, que incluyen:
1. Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA): $620 MXN (aproximadamente USD $35.99).
2. Derecho de No Residente (DNR): $558 MXN (aproximadamente USD $30).
3. Forma Migratoria Múltiple (FMM): $687 MXN (aproximadamente USD $40).
4. Visa de turista (si es requerida): entre USD $20 y $60
5. Impuesto al Hospedaje (5% de la tarifa del hotel)
6. Derecho de Saneamiento Ambiental (varía según municipio)
A esto, se suma el Visitax, de 271 pesos (aproximadamente USD $11).
De este último, abundan las quejas o dudas de quienes son abordados por agentes desconocidos y que, con terminal de cobro en mano, les hacen pagar este impuesto desconocido, algo que es desconcertante, porque parece aplicar al azar solo a algunos pocos turistas, lo que incluso les hace pensar que cayeron en un timo.
“Merece la pena que el Congreso del Estado analice si se elimina del paquete fiscal del próximo año”, señaló David Ortiz Mena. “Para mí tiene un costo alto en la imagen del estado, contra el beneficio económico que conlleva”.
PROMOCIÓN Y SEGURIDAD
En otros temas, el presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum negó que la presencia de México en la próxima Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid, como país invitado y no como socio, tenga algo que ver con las relaciones bilaterales con España, sino que obedece a un tema comercial.
La propuesta para que México fuera país socio provino de la Asociación de Secretarías de Turismo (Asetur). A los gobiernos estatales les tocaría pagar un millón de euros por el espacio en esta, la principal feria turística de Iberoamérica, y esto no se logró. A criterio de David Ortiz Mena, a la Secretaría de Turismo federal saliente, le faltó presupuesto, pero también liderazgo.
“Estamos esperanzados de que la nueva secretaria (Josefina Rodríguez Zamora) vea este ejemplo, para que lidere acciones de promoción. No se trata de regresar a lo mismo, el CPTM, sino de encontrar nuevas formas de promover al país como potencia turística mundial. Nuestra competitividad depende de ello”, aseveró.
México tendrá una presencia importante en la Fitur de 2025 y, todo indica, que será socio en la edición de 2026, lo que es positivo y permite que se puedan reorganizar las estrategias de promoción, señaló.
Finalmente, David Ortiz Mena consideró como una excelente iniciativa, la presentación del programa “Blindaje Tulum”, por el presidente municipal Diego Castañón Trejo, en la que se incluye no solo a las cinco corporaciones policiacas y castrenses, además de la Fiscalía, sino también a la iniciativa privada.
“Todos tenemos un rol que cumplir; no podemos solo exigir seguridad, sino que el empresariado, y la ciudadanía en general debe de participar en este esfuerzo, que es colectivo”, comentó el líder hotelero.
En este esfuerzo, la Asociación de Hoteles de Tulum auxiliará con la instalación de cámaras que serán operadas por las autoridades; también se proyecta contar con una “Policía Auxiliar” en la zona costera, que preste servicio a partir de hoteles, pero que vigilen a la ciudadanía y turistas.