Joaquín Hernández subrayó que en Cozumel, al haber poca densidad de población y con actividades al aire libre, el riesgo de contagio es bajo
Cozumel, Quintana Roo, 2 de julio 2020.-Con una recuperación paulatina, luego de la emergencia sanitaria, los empresarios de Cozumel, representados por María del Carmen Joaquín Hernández, presidenta de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), enfrentan una crisis en la conectividad, ya que el 88 por ciento de los visitantes eran de crucero, actividad que está suspendida desde el pasado 14 de marzo.
En entrevista para el noticiero matutino de Radio Turquesa, apuntó que la llegada de cruceros no tiene para cuándo reactivarse, aunque se calcula que será hasta fin de año. Por esa razón, afirmó que la recuperación en Cozumel se ha visto más afectada que en otros destinos turísticos.
“Nuestra conectividad está bastante mermada, pero los empresarios han puesto todo de su parte para prepararse y cumplir los protocolos. Ya contamos con el sello internacional de la WTTC como destino seguro y estamos listos para recibir visitantes”.
Joaquín Hernández subrayó que en Cozumel, al haber poca densidad de población y con actividades al aire libre, el riesgo de contagio es bajo. Además, dijo que en la isla “somos muy conscientes de que debemos cuidarnos, resguardarnos como cuando hay un huracán y sabemos que de nosotros mismos depende que la reactivación económica sea exitosa”.
En ese sentido, la dirigenta empresarial garantizó a los paseantes que en Cozumel pueden disfrutar tranquilamente de “este paraíso”, donde no hay mucha gente y se han adoptado todos lo protocolos de acuerdo con lo indicado por las autoridades en cuanto a aforos e higiene.
También indicó que, aunque actualmente se recibe sólo un vuelo diario proveniente del extranjero (Dallas, Texas) y algunas frecuencias a la semana desde Ciudad de México, se espera que pronto empiecen a llegar más y se restablezca el puente aéreo entre Cancún y Cozumel.
En cuanto al tema de las empresas que transportan pasajeros entre Cozumel y Playa del Carmen, María del Carmen Joaquín destacó que “han sido sumamente solidarias con el pueblo de Cozumel porque durante muchos meses estuvieron operando muy por debajo de sus costos”.
Han mantenido el servicio en apoyo a los habitantes locales. El aumento a las tarifas se debe a que los barcos están obligados a operar a la mitad de su capacidad para cumplir con la sana distancia, situación poco rentable para esas empresas, manifestó.
Ante la incertidumbre que ha dejado la pandemia de la covid-19, la empresaria denunció que más del 90 por ciento de las micro y pequeñas empresas están al borde de la quiebra, y se calcula que un 30 por ciento de éstas no podrán reanudar sus actividades.
“Estamos listos para recibir al turista y necesitamos su apoyo, porque aquí la gente la ha pasado muy mal y vale la pena visitar este destino, que es uno de los más seguros del país y del mundo”, finalizó.
Galu Comunicación