El aumento de la temperatura ambiental puede provocar deshidratación o enfermedades estomacales agudas en caso de consumir alimentos infectados con hongos y bacterias, por lo que la Dirección General de Salud de Puerto Morelos emitió una lista de recomendaciones dirigidas a la población.
Puerto Morelos, Q. Roo., 2 de mayo 2019.-La dependencia destacó que es necesario tomar medidas generales para el cuidado de la salud, poniendo énfasis en menores de cinco años y adultos mayores, que son los grupos más vulnerables de la sociedad, durante los periodos en los que la sensación térmica se vuelve agobiante.
Y aunque julio y agosto son los meses con los mayores índices de calor por la llamada canícula, la población debe estar alerta desde ahora, para evitar cualquier enfermedad, señaló la dependencia por conducto de una campaña informativa.
Señaló que en este periodo aumentan los riesgos a la salud por complicaciones como la deshidratación, el golpe de calor y quemaduras solares por la exposición a temperaturas elevadas.
Es indispensable promover y reforzar las medidas de prevención y protección que se deben tomar en cuenta para evitar riesgos a la salud, así como las de higiene, manejo, preparación y consumo de alimentos, entre otras que contribuyen a evitar las enfermedades propias de esta temporada.
Por tal motivo, la dependencia indicó que hay que tomar al menos 2 litros de agua embotellada, hervida o desinfectada durante el día para mantenerse hidratado; evitar exponerse al sol por periodos prolongados; utilizar ropa ligera y de colores claros; y al salir a la calle utilizar protector solar, gorra o sombrero, lentes de sol y/o sombrilla.
También procurar permanecer en lugares frescos, a la sombra y bien ventilados; ventilar el automóvil antes de abordarlo; lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, antes de comer, servir y preparar alimentos; lavar y desinfectar verduras y frutas; mantener los alimentos crudos en refrigeración hasta ser preparados; y evitar consumir alimentos en la calle, ya que el polvo los contamina y el calor los descompone rápidamente.
Cabe mencionar el golpe de calor requiere tratamiento de urgencia, ya que de no hacerlo puede dañar rápidamente el cerebro, el corazón, los riñones y los músculos. El daño empeora cuanto más se retrasa el tratamiento, lo que aumenta el riesgo de sufrir complicaciones graves o la muerte.
