Mujer se amarra a una silla en la CNDH; exige justicia para su hija violada por maestras de kínder

La mujer aseguró que no saldrá de las instalaciones de la CNDH hasta que atiendan su demanda y se castigue a los responsables del abuso sexual de su hija a los 4 años

Ciudad de México, 3 de septiembre 2020.-Este jueves inició con diversas protestas en la Ciudad de México, sin embargo, destacó que en las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en Cuba 60, una mujer se manifestó al atarse en una silla para exigir justicia por su hija, quien fue abusada sexualmente a los 4 años de edad en San Luis Potosí.

Marcela Alemán, mamá de Lía, tomó la decisión de aferrarse a las instalaciones de la CNDH luego de una reunión con la titular del organismo, Rosario Piedra Ibarra.

Sin embargo, dicha acción fue detonada luego de que la ombudsperson le dijera a Marcela que la carpeta estaba mal integrada, por lo que tendría que regresar San Luis Potosí para solucionarlo.

Así lo informó la madre de Lía durante una entrevista con Salvador García Soto para el programa “A la 1”.

A mi hija de 4 años las maestras la sacaban del colegio para estar en relaciones sexuales de adultos, con hombres y mujeres (…) Ya no tengo vida desde ese día, tengo amigas en la misma situación y estamos decididas a quedarnos aquí hasta tener justicia”, aseveró para El Heralado Radio.
El abuso sexual de Lía ocurrió en 2017 en colegio Luis Gonzaga Urbina, ubicada en Rioverde, San Luis Potosí.

Se unen para exigir justicia

Marcela Alemán y Silvia Castillo buscan justicia por la violación y el asesinato de su hijo, respectivamente, y desde este miércoles se encerraron en la sala de juntas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) a manera de protesta.

Ambas advirtieron que no saldrán de las instalaciones de la CNDH en Cuba 60 hasta que atiendan su demanda y se castigue a los responsables.

Silvia es madre de Alan Albarrán, asesinado en 2019 y la hija de Marcela fue víctima de abuso sexual en San Luis Potosí, en 2017.

“A nueve meses del asesinato de mi hijo me reuní con todo el gabinete, con Sánchez Cordero, con Alejandro Encinas, con Durazo, fueron una burla”, enfatizó Castillo al asomarse por el balcón del inmueble.

Afuera de las instalaciones de la CNDH se encuentran integrantes del Frente Nacional NiUnaMenos, quienes pernoctaron en el lugar para apoyar a las madres de las víctimas.

Al interior se encuentran, además de Marcela y Silvia, aproximadamente cinco personas más.

El Heraldo de México

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