***El código QR, la “pandemia” electoral que las autoridades estatales y federales permitieron su propagación para enfermar a la democracia
***El Partido Verde Ecologista Mexicano, sin presencia en Solidaridad, y propiedad de Jorge Emili González alías “El Niño Verde”, orquestó la compra de votos en Solidaridad y con el apoyo del gobierno Estatal, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, así como de la federación
Playa del Carmen.- El histórico arrastre popular que demostró Lili Campos Miranda, como candidata a la presidencia municipal de Solidaridad, con el que llenó calles, avenidas y plazas, fue opacado en las urnas el pasado 2 de junio por un alud de irregularidades y compra de voto, propiciados por el Partido Verde Ecologista Mexicano, y avalados por autoridades estatales y federales.
De que otra manera puede explicarse el respaldo cuerpo a cuerpo que le expresaron decenas de miles de solidarenses a Lili Campos al abrir sus hogares, sus negocios, talleres durante sus largas caminatas. Allí salieron las más de 42 mil 929 personas, de carne y hueso, convencidas y decididas a votar por quien confiaron para ser su alcaldesa los próximos tres años.
Sin embargo, el acarreo, la compra de votos, el turismo electoral, el sometimiento, las amenazas, el amedrentamiento, la manipulación del padrón electoral, la tardía apertura de las casillas, el cierre temprano de las urnas, la imposición de funcionarios de casilla especiales impuestos por el partido verde, el incumplimiento de las autoridades electorales en el pago del apoyos de alimentos a los ciudadanos que escrutaron los votos, entre muchas otras anomalías registradas el día de la elección, fueron las que impusieron un triunfo manchado.
Aunado a esto, la presencia de una autoridad estatal y federal complaciente con quienes compraban las conciencias ciudadanas, y amenazante contra quienes defendían el ejercicio democrático.
La prueba más contundente de advertencia y con afán de amedrentamiento a los verdaderos demócratas, fue la presencia del Fiscal del estado, Raciel López Salazar; el Secretario de Seguridad, Julio César Torres; y del Presidente del Poder Judicial, Heyden Cebada en el café Andrade ubicado en el centro de Playa del Carmen.
Esta reunión esta ampliamente documentada, pero más aún el sentido de su precia pues durante el día de la elección hicieron caso omiso a las denuncias de irregularidades cometidas por operadores de campaña vinculado al Partido Verde Ecologista Mexicano.
Otro acto para atemorizar a los electores fue el uso de uno de los helicópteros de la Secretaría Seguridad Pública Estatal que realizada descensos innecesarios en zonas y colonias que simpatizan con la alianza Fuerza y Corazón por Quintana Roo.
Saldo blanco para sus protegidos, y amedrentamiento, acoso y persecución para sus oponentes.
Los delitos electorales estuvieron a la vista de todos. Documentado por periodistas y ciudadanos que denunciaban casas, locales y vehículos a donde llegaban decenas de personas a recoger los hoy famosos “códigos QR” con los que el elector, al pasar a ejercer su derecho, tenían que tomar fotografía a las boletas electorales marcadas a favor de las y los candidatos ordenadas y a lado el código QR, para justificar que se cumplió la orden, y con ello garantizar el pago que osciló entre los 500 hasta los 3,500 pesos.
El delito de turismo electoral también está debidamente documentado. Este fue planeado y ejecutado con meses de antelación de la elección. En Solidaridad fuimos testigos de las invasiones en predios propiedad privada. Fueron cientos de familias que se asentaron en los terrenos hoy conocidos como Alfa & Omega y San Judas Tadeo, ubicados al poniente del municipio.
Esas familias, todas ellas credencializadas con direcciones de diversos puntos de la ciudad, pues les fue fácil conseguir comprobantes de domicilio que dejan tanto Aguakan como la CFE a las afueras de las casas. Es decir que dieron domicilios falsos con la complacencia del Instituto Nacional Electoral (INE), quien siempre justificó falta de personal para verificar domicilios.
Hoy se sabe que la mayoría de las familias asentadas de manera irregular en los predios mencionados son procedentes del Estado de México, Chiapas, Tabasco, Ciudad de México entre otros estados. Todos ellos fueron trasladados a votar el 2 de junio en taxis y camionetas Van de pasajeros del Sindicato “Lázaro Cárdenas del Río Por su puesto con sus respectivos códigos QR.
En fin, la lista de irregularidades es larga y variada, misma que continuaremos poniendo en evidencia en los próximos días.
Lo que si se puede afirmar es que a lo largo de dos meses de campaña, la también presidenta municipal de Solidaridad Lili Campos, recibió saludos y abrazos cargados agradecimiento, de cariño, de respaldo, pero sobre todo de aprobación para dar continuidad a un gobierno renovado que resurgió de entre las cenizas que dejó la administración que encabezó Laura Beristain y sus correligionarios de Morena y Verde Ecologista.
Es por ello que podemos afirmar que Lili Campos ganó en las campañas y le arrebataron el triunfo en las urnas con malas prácticas y la compra indiscriminada del voto, bajo la complacencia y complicidad de las autoridades estatales y federales.
