Son cuatro los cargos relativos a narcotráfico los que se imputan al general Salvador Cienfuegos, de acuerdo con la denuncia formal por la que lo detuvieron
Los Ángeles, 16 de octubre 2020.-De acuerdo con un documento, los cargos presentados en la Corte de Nueva York, por las que encarcelaron a Cienfuegos Zepeda versan en delitos asociados al narcotráfico.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos solicitó a la juez Carol B. Amon la detención de Salvador Cienfuegos, y expresó que, como titular de la Secretaría de la Defensa, entre 2012 y 2018, el exsecretario “abusó de su posición” para ayudar al cártel de los Beltrán Leyva, la cual calificó como “una organización extremadamente violenta”
De acuerdo con documentos judiciales del Departamento de Justicia, aún sin sellar, señalan que Cienfuegos Zepeda protegió al cártel referido de operaciones militares.
Además, dirigió operaciones militares contra rivales.
También se encargó de dirigir operaciones militares contra rivales. Logró asegurar el “transporte marítimo para envíos de drogas”, y presentó el cártel a otros funcionarios que aceptan sobornos.
Además, ayudó al cártel sobre el avance de las investigaciones estadounidenses, testigos cooperantes, informantes “que finalmente resultaron en el asesinato de un miembro del cártel H-2” que creían incorrectamente que estaba trabajando con la policía.
Por último, según se lee en los documentos, se acusa al exsecretario de Defensa mexicano de priorizar “su codicia personal sobre sus deberes juramentados como servidor público, y aseguró el éxito continuo y la seguridad de una de las organizaciones de narcotráfico más violentas de México”.
Fiscalía acusa por narcotráfico y lavado de dinero
La Fiscalía Federal del distrito este de Nueva York acusó de narcotráfico a Salvador Cienfuegos, el secretario de Defensa durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto.
Tres de los cargos están relacionados con la producción, tráfico y distribución de estupefacientes y un cuarto con el blanqueo de dinero, según un documento de la fiscalía.
El caso del General lo llevará el juez Cogan J, el mismo que lleva el caso de Genaro García Luna.
Esta es la denuncia formal por la que detuvieron al general Salvador Cienfuegos. Será trasladado a un centro de detención en Nueva York
Cargo 1. Conspiración internacional para la fabricación y distribución de heroína, cocaína, metanfetamina y marihuana
Cargo 2. Conspiración para Importación de Heroína, Cocaína, Metanfetamina y Marihuana.
Cargo 3. Conspiración para Distribución de heroína, cocaína, metanfetamina y marihuana
Cargo 4. Conspiración por lavado de dinero de ganancias de narcóticos
El gran jurado que debía determinar si había pruebas suficientes para juzgar a Cienfuegos, cuya detención se considera un nuevo golpe al legado de Peña Nieto, ha decidido imputarlo por cuatro cargos.
El primero de los cargos de narcotráfico es por conspirar para la producción y distribución internacional de heroína, cocaína, metanfetamina y marihuana; el segundo por conspirar para importar estupefacientes y el tercero por conspirar para distribuirlos.
“El acusado Salvador Cienfuegos Zepeda, también conocido como “El Padrino” y “Zepeda”, junto con otros, conspiró a sabiendas e intencionalmente para fabricar y distribuir una o más sustancias controladas, con la intención, a sabiendas y teniendo una causa razonable para creer que tales sustancias serían importadas ilegalmente a los Estados Unidos desde un lugar fuera del mismo”, reza el texto.
En concreto, el escrito de la Fiscalía, firmado por el titular del Distrito este de Nueva York, Richard Donoghue, acusa a Cienfuegos de estar implicado en la producción, tráfico y distribución de mil kilogramos de marihuana, 500 gramos o más de metanfetamina, 5 kilogramos o más de cocaína y 1 kilogramos de heroína entre diciembre de 2015 y febrero de 2017.
El cuarto cargo, de “conspiración para lavar las ganancias de los narcóticos”, sostiene que realizó transacciones económicas con este fin entre las mismas fechas, aunque no aporta ninguna cantidad específica.
Cienfuegos fue arrestado el jueves a petición de la agencia antidrogas estadounidense (DEA) en el aeropuerto de Los Ángeles, donde viajó con su familia.
Recibirá asistencia consular como cualquier otro: Ebrard
El canciller Marcelo Ebrard confirmó que son cinco los cargos relativos a narcotráfico los que se imputan a Salvador Cienfuegos, exsecretario de la Defensa Nacional.
El detenido será trasladado a Nueva York después de su captura en Los Ángeles.
Ebrard también dio a conocer que la primera audiencia contra Cienfuegos se llevará a cabo a partir de las 16:30 h tiempo de la Ciudad de México.
La Consul, Marcela Celorio, señaló que el abogado del exsecretario de la Defensa llegará en unas horas a Estados Unidos desde México.
De acuerdo con la agencia Associated Press, Salvador Cienfuegos, exsecretario de la Defensa Nacional, fue detenido en el Aeropuerto de Los Ángeles, California, por órdenes de la DEA, acusado de tráfico de drogas y lavado de dinero.
La acusación contra Cienfuegos estaría radicada en Nueva York, la misma donde se lleva el caso contra Genaro García Luna y donde se llevó el juicio de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, calificó este viernes de “lamentable” el arresto y consideró que es una “muestra inequívoca de la descomposición del régimen” que imperaba antes de su Gobierno.
El presidente explicó que “no existe ninguna investigación en México contra el general Cienfuegos que tenga que ver contra el narcotráfico”, aunque confesó que hace 15 días fue informado por la embajadora mexicana en Estados Unidos, Martha Bárcena, de que en el país vecino “se hablaba de una investigación” sobre el general, si bien “no era nada oficial”.
El mandatario avanzó que la investigación es un asunto “del mismo juzgado de Nueva York” que lleva el juicio de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad del Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012), arrestado por nexos con el narcotráfico.
También es la corte que condenó a cadena perpetua a Joaquín “el Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa.
¿Quién es Salvador Cienfuegos?
El general retirado Salvador Cienfuegos, exsecretario de Defensa en el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018), era considerado uno de los militares con más reputación del Ejército y muy estimado entre las tropas, una carrera empañada por la tragedia de Ayotzinapa y, ahora, la detención el pasado jueves en Estados Unidos a petición de la DEA.
Nacido el 14 de junio de 1948 en Ciudad de México, Cienfuegos ingresó en el Ejército a comienzos de 1964, con apenas 15 años, y estuvo más de cinco décadas en activo. Se licenció en Administración Militar y obtuvo una maestría en Administración Militar para la Seguridad y Defensa Nacionales.
A lo largo de su larga carrera fue comandante de varios batallones y regiones militares, además de director del Heroico Colegio Militar.
En 2012, con la llegada de Enrique Peña Nieto al poder, Cienfuegos fue nombrado titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, que ocupó hasta el fin del mandato con un historial aparentemente perfecto, pese a algunas polémicas.
“Ustedes deben estar convencidos y orgullosos de que han realizado una labor fundamental, única amplia y de gran importancia, y gracias a ello somos la institución que más resultados aporta al esfuerzo nacional en materia de seguridad. Y gracias a ustedes, hemos disminuido considerablemente las quejas de derechos humanos”, dijo el 12 de noviembre de 2018, en su último evento público antes de dejar el cargo y rodeado de centenares de efectivos.
Duro, popular, polémico
De semblante duro y aparentemente imperturbable, Cienfuegos era considerado uno de los militares más influyentes del Ejército, aunque sus seis años a la cabeza de la institución lo pusieron en el centro de varias polémicas.
Las que quedarán en el imaginario colectivo son la tragedia de Ayotzinapa y la matanza de Tlatlaya.
Aunque según la primera versión oficial de los hechos el Ejército nunca tuvo participación en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, la sombra del delito siempre persiguió a esta institución.
En un primer momento, Cienfuegos mostró su disposición a que los militares del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala, prestaran declaración. Pero en sus años en el cargo ni un militar fue imputado pese a reiteradas peticiones de familiares y los expertos independientes de la CIDH.
En octubre de 2010, Cienfuegos dijo que los soldados que estuvieron en la zona no tenía “por qué declarar” ante el grupo de expertos de la CIDH que investigaba los hechos, porque solo responden ante “las autoridades mexicanas”.
No fue hasta este septiembre, cuando se cumplieron seis años de la tragedia y bajo la presidencia de Andrés Manuel López Obrador, que se anunciaron ordenes de captura contra militares por el caso.
Bajo el paraguas de Cienfuegos también se cometió la matanza de Tlatlaya.
En la madrugada del 30 de junio de 2014, 22 personas fueron asesinadas por soldados en una bodega ubicada en el municipio de Tlatlaya, en el Estado de México, colindante con la capital mexicana.
Según la versión oficial del Gobierno, los fallecidos eran presuntos delincuentes muertos en un choque con militares. Pero un posterior informe de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) determinó que los militares ejecutaron a 15 de los 22 muertos.
Pese a todo, su popularidad dentro y fuera del cuerpo permanecía, y su reputación se mantuvo para muchos prácticamente intachable, aguantando en el cargo los seis años de la vilipendiada era Peña Nieto al frente de la Secretaría de Defensa.
Una de sus pocas salidas de tono se dio cuando se posicionó a favor de que los militares dejaran de realizar tareas de seguridad pública y regresaran a los cuarteles.
Aunque posteriormente se retractó.
Herencia corrupta
El aura de intocable del militar, hoy de 72 años, tocó fin con su captura en el aeropuerto de Los Ángeles, donde iba a pasar unos días con la familia, a petición de la DEA.
La detención de Cienfuegos es la de mayor perfil de un funcionario mexicano en Estados Unidos desde la del exministro de Seguridad Pública de Felipe Calderón (2006-2012), Genaro García Luna, juzgado hoy por nexos con el Cártel de Sinaloa.
El arresto de Cienfuegos supone un nuevo golpe al legado del expresidente Peña Nieto, tras la extradición desde España del exdirector de Pemex Emilio Lozoya, acusado de recibir sobornos de Odebrecht, y la encarcelación el año pasado por corrupción de la exsecretaria de Desarrollo, Rosario Robles.
La captura es, además, un golpe duro a la institución, símbolo de estabilidad en México.
“Es un hecho muy lamentable que un exsecretario de la Defensa sea detenido acusado por vínculos con el narcotráfico”, expresó en conferencia de prensa el presidente López Obrador, quien no obstante señaló que durante este viernes Estados Unidos dará a conocer “los motivos” exactos de la detención.
El presidente explicó que “no existe ninguna investigación en México contra el general Cienfuegos que tenga que ver contra el narcotráfico”, aunque confesó que hace 15 días fue informado por la embajadora mexicana en Estados Unidos, Martha Bárcena, de que en el país vecino “se hablaba de una investigación” sobre el general, si bien “no era nada oficial”.
El mandatario avanzó que la investigación es un asunto “del mismo juzgado de Nueva York” que lleva el juicio de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad del Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) arrestado por nexos con el narcotráfico.
También es la corte que condenó a cadena perpetua a Joaquín “el Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa.
Con información de López-Dóriga Digital y EFE