Al menos 20 familias de Cancún han sido desalojadas este viernes 15 de noviembre de los departamentos en los que llevaban habitando entre 10 a 15 años por no haber podido acreditar la propiedad de los inmuebles.
Aunque en un principio las personas opusieron resistencia, la llegada de diversos elementos de corporaciones de seguridad municipal, estatal y federal hizo que se acatara el fallo y se retiraran con todo y sus pertenencias.
De acuerdo con lo reportado, los hechos ocurrieron la mañana de este viernes 15 de noviembre en la zona de la Supermanzana 44 de Cancún, en un edificio de departamentos que se ubica en las avenidas Venus con Kabah.
Al sitio llegaron unos actuarios, quienes mostraron a los residentes de un edificio con 24 departamentos el mandato judicial que los obligaba a dejar esos inmuebles por no acreditar la propiedad de los mismos.
Los difrectamente afectados son integrantes de familias de Cancún que llevaban viviendo en este edificio de la Supermanzana 44 hasta por 15 años, pero que debido a que no pudieron demostrar que adquirieron estos departamentos tuvieron que dejar sus viviendas.
Como se esperaba que hubiera resistencia de los vecinos de esta zona, llegaron al sitio varios elementos de la Policía a bordo de diversas unidades.
De hecho, y como se montó este fuerte operativo, los propios vecinos de la zona tacharon de exagerada y arbitraria la acción, ya que dijeron que aunque los desalosos eran en la Manzana 5, los habitantes de las Manzanas 3 y 4 no podían entrar o salir de sus viviendas porque había varios vehículos obstruyendo el paso. Algunos eran de las autoridades y otros los camiones de mudanza de quienes debían irse de sus domicilios.
DESALOJOS E INVASIONES, AÑEJOS PROBLEMAS
Desalojos como el vivido este viernes 15 de noviembre en la Supermanzana 44 de Cancún son una constante en diversos municipios de Quintana Roo, especialmente los más grandes y con más afluencia turistica: Benito Juárez, Solidaridad, Tulum y la capital Othón P. Blanco.
Muchas familias que llegan a vivir a la entidad y a trabajar en la industria turística suelen ser convencidos por algunas personas de invadir propiedades con la promesa de que más adelante se arreglarán los papeles y se harán con el título de esos inmuebles.
Sin embargo, muchas veces son engañados, y pese a que le dan dinero a estos sujetos, al final no se les resuelve nada, y pasado cierto tiempo, los verdaderos propietarios denuncian ante las autoridades y al final, como pasó ahora, las familias acaban siendo desalojadas.
A estos casos hay que añadir los desalojos de hoteles y centros de hospedaje, los cuales se dan por diversos conflictos políticos y económicos.