Un tribunal federal de apelaciones emitió la noche de este martes una orden que le impide nuevamente a Texas arrestar a migrantes que sean sospechosos de haber ingresado ilegalmente al país. El fallo se produjo apenas horas después de que la Corte Suprema permitió que la nueva ley migratoria entrara en vigor.
Hace algunas semanas, un panel de la misma Corte Federal de Apelaciones del Quinto Circuito despejó el camino para que Texas aplicara la ley, al suspender la orden de un juez de menor instancia.
Pero un panel del tribunal de apelaciones, en una decisión de 2 a 1, retiró dicha suspensión antes de que la corte escuche los argumentos el miércoles.
Las autoridades de Texas no habían anunciado ningún arresto en virtud de la nueva ley.
La ley es una de las medidas antimigrantes más drásticas en la historia de Estados Unidos, convierte en delito menor el que un extranjero ingrese o intente entrar al estado desde una nación extranjera de forma irregular. La falta se convierte en un delito grave, con sentencias de hasta 20 años de prisión, si el infractor es reincidente.
La iniciativa también permite que las autoridades estatales ordenen la expulsión de personas sin un proceso legal. Asimismo, los oficiales de policía podrán arrestar a cualquier individuo del que sospechen que ingresó de manera irregular al país, y tendrán la facultad discrecional de expulsarlo a México en vez de arrestarlo.
Inicialmente, la medida promovida por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, debía entrar en vigor el pasado 5 de marzo, pero un juez federal se puso del lado de los demandantes y la prohibió.
Con información de AP y EFE.