**Sin calidad moral para continuar al frente de la casa Ejidal, Asencio Reynoso envía ridícula e ignorante exigencia al gobernador para mantenerse en el cargo
Alejandro Vargas González
La necedad de José Julio Asencio Reynoso de perpetuarse como presidente de la Casa Ejidal de Puerto Morelos para saquearla, lo ha llevado al grado de la locura, mostrando su arrogancia ignorante, despilfarrando tierras ejidales para ejercer su asqueroso soborno y beneficiarse él y unos cuantos, ejecutando su cobarde traición a la comunidad de ejidatarios que han trazado con trabajo y sacrificio la brecha hacia la certeza patrimonial.
Si bien la carrera de traición, sobornos, despojos y mentiras de Asencio Reynoso comenzó hace varios años en Chetumal y Cancún, hoy muestra ser más cínico, grotesco y aberrante en su afán de arrebartarle tierras a los ejidatarios que lo buscan remover para impedir un saqueo mayúsculo como lo ha hecho el destestable presidente ejidal.
Y para muestra basta echarle una mirada al acta de la primera convocatoria con fecha 24 de julio de 2017 en la que Asencio Reynoso busca quetarle al ejido más de cinco mil hectáreas.
En el punto número 7 del orden del día del documento se señala que se debe “someter a consideración y en su caso autorización de la Asamblea para que el polígono norte de reserva ecológica del Ejido con una superficie aproximada de 5,300 hectáreas sea designada voluntariamente a la conservación”.
Más adelante, en los puntos del 8 al 15 del documento se mencionan los nombres de los beneficiarios que son Socorro Josefina Martínez Castillo, Eduardo Martínez Llamas, Vinicio Luna Hernández, José Félix Gerardo Medina Hernández, Juan Pastor Almazán Arteaga, Raquel Figueroa Nava, Lee Whong y María Teresa Uitzil Maas.
El texto que pretendía ser impuesto a los ejidatarios está fechado en el Ejido de Puerto Morelos, municipio de Puerto Morelos, estado de Quintana Roo, a 24 de julio de 2007 y fue firmado por el presidente del Ejido José Julio Asencio Reynoso; el secretario Jahaziel Humberto González Vargas; y el tesorero José Nicolás Lugo.
El menosprecio que Asencio Reynoso siente por los ejidatarios de Puerto Morelos al quererlos sorprender con su asamblea a modo, le valió que su frustrado plan se le revirtiera provocando que los poseedores de la tierra se organizaran para exigir por todos los medios destituirlo del cargo.
La petición de los ejidatarios ya fue impuesta ante todas las instancias civiles y judiciales a nivel, local, estatal y federal, incluso ya hasta se realizó una asamblea ejidal en la que se propone que se le destituya.
Sin embargo, ante los temores de ser destituido del cargo, Asencio Reynoso envió al gobernador del Estado Carlos Joaquín González, una carta que lejos de mostrar argumentos validos a su favor resulta un lloriqueo pueril, lleno de arrogancia ingnorante.
El cargo que solicita sea removido es del orden federal y poco o nada puede intervenir el gobernador, además cae en contradicciones al solicitar la intervención del Ejecutivo estatal de Quintana Roo, exponiendo que el ejido tiene sus propias reglas, costumbres y estatutos internos, es decir que tiene autonomía, por lo que también sería una ilegalidad la intervención.
A los ejidatarios de Puerto Morelos no los podrá engañar y despojar como lo hizo con el ex gobernador Mario Villanueva Madrid, quien se encuentra recluido; o al ex procurador general de justicia de Quintana Roo, Francisco Alor Quezada, caído en desgracia por problemas de salud, pero este tema será abordado en otra entrega de Arponazos.
***Anexamos los documentos que se mencionan en la columna Arponazos.
NuevoDocumento 2017-08-09
