Cancún.- El Tren Maya corre el grave riesgo de no entrar en operaciones en la fecha prevista, debido a que carece de un Plan Maestro debidamente integrado, entre otras cuestiones técnicas y administrativas esenciales para su correcta construcción, alertó la senadora del Partido Acción Nacional, Mayuli Martínez Simón al hacer referencia al Informe de la Auditoría Superior de la Federación sobre la cuenta pública 2020.
La legisladora expresó que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) revisó los recursos aplicados al Tren Maya, detectando que el costo del proyecto se incrementó en 26. 9 por ciento, al pasar su costo de 141 mil millones de pesos a 178 mil 984 millones de pesos.
“Hay una falta de seriedad técnica en la construcción del tren, lo que evidentemente encarece este proyecto que se promocionó por parte del gobierno federal, como estratégico para promover el desarrollo económico y detonar el desarrollo turístico de la Península de Yucatán”.
Mayuli Martínez detalló que la Auditoría Superior de la Federación halló que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) no contó con un Plan Maestro del Proyecto debidamente integrado, “que permitiera establecer líneas estratégicas orientadas a definir el plan de competitividad; las oportunidades e inversiones requeridas; la estrategia de mercado, y la instrumentación del plan para garantizar el proceso de planeación, ejecución y seguimiento del Proyecto”.
“Este informe nos deja serias dudas sobre la construcción del tren, ya que refuerza la idea que se construye al vapor, por capricho, gastando millones y millones de pesos, que bien podrían emplearse en hospitales, en escuelas o en combate real de la pobreza”, declaró.
Señaló que, entre las observaciones efectuadas por la ASF, se encuentra que Fonatur no contó con instrumentos necesarios y suficientes para evaluar la mitigación de los impactos ambientales.
“El gobierno federal empezó el proyecto del tren, sin saber qué afectaciones y consecuencias tendrá para el medio ambiente, de ahí que nos expliquemos porqué derribaron más de 20 mil árboles en Playa del Carmen, y posteriormente, cambiaran el trazo de las vías”, agregó.
La senadora expuso que Fonatur tampoco acreditó que se realizaron reuniones ejidales para tratar la expropiación, procedimientos y aprobación de convenios para expropiación de terrenos en 28 ejidos.
“En general, se determinó que, de no corregir las debilidades encontradas, el riesgo de que el proyecto no entre en operación en la fecha prevista se incremente y no se alcance su objetivo de promover el desarrollo económico, detonar el desarrollo turístico incluyente en la Península de Yucatán”, adelantó.
Mayuli Martínez comentó que estará atenta a que Fonatur y el Gobierno Federal cumplan con las observaciones referidas.
“El Tren Maya corre el grave riesgo de descarrilarse, como sucedió ayer con el tren transístmico, miles de millones de pesos invertidos en proyectos que carecen de calidad y no cumplen los objetivos para que los fueron creados”.