Sector restaurantero, uno de los pilares de la economía, ya cuenta con protocolos que deberán implementarse en los negocios
Playa del Carmen, Quintana Roo, 4 de junio 2020.-Con la Nueva Normalidad se prepara el municipio de Solidaridad, gobernado por Laura Beristain Navarrete, para la reactivación económica con protocolos de salud, higiene y seguridad que deberán observar los negocios para prevenir contagios de COVID-19 a sus empleados y clientes.
Las medidas van de acuerdo a los lineamientos técnicos específicos para el retorno a las actividades económicas establecidos por las Secretarías de Salud, Trabajo, Economía e IMSS, publicadas en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Amanda Degyves Carral, secretaria de Desarrollo Económico, Turístico y Atracción de Inversiones, recordó que la apertura de las actividades económicas será paulatina, escalonada y siguiendo el semáforo epidemiológico.
Precisó que a partir del primero de junio inició la Nueva Normalidad -solo para actividades esenciales-, pero Quintana Roo se encuentra en semáforo rojo; entonces, el proceso de reapertura de actividades secundarias dependerá de lo que determinen las autoridades de salud a nivel estatal y federal.
En tanto ha estado trabajando en coordinación con cámaras y asociaciones empresariales, comerciales, restauranteras y hoteleras en la familiarización de las normas y protocolos que deberán implementarse al interior de los negocios.
La funcionaria, manifestó que, en ese sentido, el sector restaurantero se encuentra adelantado y ha definido criterios que se deberán respetar en los establecimientos con lineamientos generales de sanitización e higiene del lugar y el personal, reducir el contacto físico con los comensales a través de menús desechables, digitales o con código QR, cambiar y desinfectar la mantelería después de cada servicio, los buffets y barras deberán contar con barreras anti estornudos.
Se limitará el pago en efectivo y a su vez se fomentará el uso de métodos electrónicos.
En los negocios, se deberá contar con barreras físicas para evitar el contacto entre clientes, empleados y proveedores.
En el caso del personal, en las áreas comunes los lavamanos deben estar en condiciones adecuadas, limpios y con un buen suministro de agua, jabón y toallas de papel desechables; dispensadores de alcohol gel a disposición en puntos estratégicos.
Se observará en todo momento la sana distancia y la separación de las oficinas con áreas de producción, además, los trabajadores deberán contar con equipo de protección personal: cubre boca y caretas.
“Por instrucciones de nuestra alcaldesa, Laura Beristain, hemos trabajado muy de cerca con todas las asociaciones, consejos y cámaras empresariales, así como sindicatos, líderes y comités de comercio para que trabajen en sus protocolos sanitarios para la Nueva Normalidad”, concluyó Degyves Carral.