Por Carlos Alberto Rosales
@Carlos85458323
…y, que, no quede como un político astroso y contrahecho con los quintanarroenses. Que promete a bote pronto, sobre la marcha de manera improvisada. Como aquellos discursos del populismo de centroizquierda que son la sombra de la sombra
Parecería que el proyecto del “Tren Maya” será la magna obra para el sureste de México, que traeráderrama y desarrollo para una de las regiones socialmente marginada del país, pese a contar con reservorios naturales de gran valor y, como en el caso de Quintana Roo ser la puerta de acceso de las mitad del ingreso de divisas por turismo del país.
Pero quizás lo de bajar el IVA a la mitad en el sur del estado y, convertir a la capital: Chetumal en zona libre, traerá tanto beneficios pero, también, múltiples problemas de especulación empresaria. A la potencial reactivación de la actividad económica, se puede sumar efectos no deseados como el declive y deterioro de la “zona libre” de Belice con los problemas que esto puede traer aparejado. Pero, también es cierto que durante años, mucho dinero del empresariado local fue transferido a esa “Zona Franca” en la nación vecina, buscando la rentabilidad de capital que más que de trabajo, se convirtió en especulativo.
Sólo basta ver las bodegas y depósitos que se encuentran en el lugar, que difiere por mucho con la franja fronteriza con Estados Unidos, al norte de México.
Si Belice se queda sin el negocio de la fayuca, pierde una actividad económica marginal que es parte de la economía diaria del país y que, no puede absorberotras industrias en declive como la de ingenios azucareros, aserraderos y, algún que otro cultivo ilegal.
Lo de mudar la Secretaría de Turismo a Chetumal ha sido una promesa de campaña insostenible por lo que significa en lo institucional, operativo y, presupuestario, sólo en concepto de indemnizaciones y reubicación de burócratas del organismo que no acepten trasladarse desde la capital del país a una cabecera de provincia, donde tendrán que convivir con las limitaciones de una pequeña ciudad, tan lejana a la cosmopolita ciudad de México. Creo, que ni Miguel Torruco Marqués, creyó en lo del traslado del organismo y, en recibir a los grandes empresarios de la industria hotelera mundial, en Chetumal que adolece de la suficiente infraestructura y comodidades. Quizás si se hubiera hablado del traslado a Cancún, el proyecto sería más lógico y factible, porque es el corazón del turismo del país donde llegan esporádicamente y con gusto, personajes como Alex Zozaya, Los Riu, Barceló, entre otros importantes representantes de la industria hotelera a nivel mundial.
Cozumel inicia su reconversión financiera
Como era de esperarse, el municipio de Cozumel, sesionará hoy con el resolutivo hecho llegar al Honorable Ayuntamiento desde la Secretaría General, a cargo de Manuel Cota Becerra para evaluar la propuesta, análisis y discusión de la contratación de una línea de financiamiento para la reestructuración de la deuda del municipio que preside Pedro JoaquínDelbouis.
Lo comentábamos en ediciones anteriores que esta decisión debería ser tomada por alguno de los alcaldes de la zona Norte, ante la precariedad de las finanzas de sus respectivos Ayuntamientos.
Joaquín Delbouis, ni lerdo ni perezoso, será el primero en sacar el “lápiz rojo” para iniciar el saneamiento y desahogo financiero de un municipio importante pero, que ha venido gastando más de lo que recauda desde épocas del ex presidente municipal, Juan Carlos González (2008/2011), que pasó a la notoriedad por aquella, su frase de: “Cualquier Güey puede ser Presidente Municipal” y, sumergió a Cozumel, por primera vez en su historia en serios problemas financieros.
Pero fue hasta el trienio del ex alcalde Freddy MarrufoMartín cuando Cozumel se consagró como uno de los líderes con más alta relación deuda vs ingresos totales y bajó la calidad crediticia del otrora municipio fuerte de Quintana Roo.
A finales de 2017 y ya con Perla Tun Pech como alcaldesa el rojo en las finanzas declarado del municipio ascendía a 425 millones de pesos que representaba en la práctica el 45 por ciento de sus ingresos. Perla Tun al culminar su trienio acotado hace un par de semanas contabilizó una deuda bancaria de 433 millones 355 mil pesos. Es decir de 8 millones 355 mil pesos más que la heredada de la administración Marrufo.
Ese monto más la deuda con proveedores que sumaría otros 230 millones lleva la deuda actual de la isla de las Golondrinas a poco menos de 700 millones, de los que la actual administración busca financiar sólo 430 millones aproximadamente.
La sideral cifra en la que se endeudó Cozumel en épocas del ex alcalde Marrufo Martín era justificada para utilizar en inversión productiva que nunca se realizó.
Ahora le toca a la nueva administración emprolijar las cuentas del municipio y, esto traerá aparejado un plan de austeridad y racionalización que deberá llevarse a cabo para beneficio de los vecinos.
El mismo derrotero tendrá que seguir los municipios de Benito Juárez y Solidaridad por su alto endeudamiento y, la caída de sus ingresos y, abultadas nóminas.