El arraigo, clave para la “cultura de huracanes”

La población sabe reaccionar ante huracanes
Cancún, Q. Roo,22 de octubre 2018.– Con más de 30 huracanes vividos en Isla Mujeres, la gente ya tiene una cultura de huracanes y sabe qué hacer antes, durante y después de un fenómeno meteorológico. Eso lo sabemos quienes somos de aquí y los avecindados de años, manifestó el cronista isleño Fidel Villanueva Madrid.
Asimismo, a 13 años del huracán Wilma, dijo que definitivamente no fue el más potente ni el más devastador en el caso de isla Mujeres. Ese fue Gilberto, en 1988.
A mí me tocó Janet, a los 6 años de edad. Fue el primer huracán que experimenté y vi lo que mis papás hacían. Lo aprendí de ellos y ellos de mis abuelos. Luego vinieron Carmen, Gilberto, Isidoro, Emily, Roxanne y Wilma. La gente de Isla Mujeres ya tiene una experiencia personal y ya no se asusta por un huracán, explicó.
El cronista isleño, quien participó con sus homólogos de Cancún y Cozumel en la conferencia “Desastres Naturales: Terremotos y Huracanes”, con motivo del XXV aniversario de la Semana Nacional de Ciencia y Tecnología, en la Biblioteca Antonio Enríquez Savignac, señaló que, en el caso de Cancún, todavía falta avanzar en ese sentido, a pesar de que los 30 huracanes que afectaron a la isla también le pegaron a esta ciudad.
Con todo respeto, quizá falte también amor por Cancún, porque si bien es cierto que, como dice mi amigo Francisco Verdayes, los malandros, delincuentes, asaltatiendas son 3 mil y los cancunenses 800 mil, todo mundo debería involucrarse en levantar a la ciudad, subrayó.
Villanueva Madrid aseguró que en Isla Mujeres ni por asomo pasa eso de que alguien aproveche la oportunidad para ir a robar a destruir. “Eso quiere decir que algunos no le tienen amor a Cancún”, manifestó.
Cuando hay amor por el lugar, cuando pasamos del hombre que viene a trabajar, a ganar dinero para llevar a su tierra, al que se integra deveras y es orgullosamente cancunense, entonces, podemos presumir que no pasarán esas cosas. Cancún necesita, desde mi punto de vista y con todo respeto, más cultura en torno al tema de los huracanes y conocimiento de la historia del lugar, expresó.
En ese sentido, subrayó que el huracán Wilma evidenció a los que no quieren a Cancún. “Ahí están los reportajes, sólo hay que entender”.
Cancún  nos necesita a todos, prosiguió. Yo no vivo en Cancún, pero tengo que pasar a comprar a aquí, todos necesitamos de Cancún, pero si le da gripe, a Isla Mujeres le da una pulmonía porque toda la gente va para allá.
Consideró que si la gente quiere a su ciudad, la conserva, la cuida. Así como una alcantarilla  llena de basura no es culpa del gobierno, la violencia y la inseguridad tiene mucho qué ver con que van dos generaciones a las que no se les dan clases de civismo ni se les inculcan valores en las escuelas, pese a que lo único que modifica hábitos es la educación.
“Hay que retomar ese amor a México que nos enseñaron los viejos, cantar en las escuelas el Himno Nacional y rendir honores a la bandera”, explicó. (Infoqroo)