Del total de visitantes, casi 75 por ciento fueron extranjeros, cuya afluencia se recuperó a fin de año
Cancún, Q. Roo, 15 de enero 2019— Las zonas arqueológicas de Quintana Roo cerraron el 2018 con casi 3.5 millones de visitantes, de los cuales y 2 millones 200 mil llegaron a Tulum, cifra importante y alentadora luego de las crisis causadas por el sargazo y algunas alertas de viajes, manifestó Adriana Velázquez Morlet, quien dejará hoy el cargo de delegada del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Del total de visitantes, aclaró, casi 75 por ciento fueron extranjeros, cuya afluencia se recuperó a fin de año.
La funcionaria, quien será sustituida por el antropólogo Margarito Molina, fue transferida al Centro INAH-Campeche y adicionalmente estará encargada del seguimiento de los trabajos arqueológicos de salvamento y prospección que se realizarán a lo largo de la ruta del Tren Maya y trabajará en un programa de mejora de los servicios en las casi 40 zonas arqueológicas que estarán cerca de la vía en los cinco estados involucrados en el proyecto.
Entrevistada para el noticiero matutino de Radio Fórmula, Velázquez Morlet, quien llegó a Quintana Roo hace 25 años para trabajar en Kohunlich, recordó que durante su gestión se abrieron al público Dzibanché, Oxtankah, El Meco y San Miguelito y se hicieron unidades de servicios en prácticamente todos los sitios arqueológicos.
Se fortaleció el trabajo de mantenimiento y conservación de los sitios, en algunos de los cuales hubo avances importantes en cuanto a la investigación, conservación y restauración de edificios, como en Kohunlich y Dzibanché, añadió.
Asimismo, dijo que Muyil es otro ejemplo, porque era una zona arqueológica muy pequeña a la que casi nadie llegaba y ha crecido mucho en visitantes. En Tulum se hizo una nueva unidad de servicios.
En el Museo Maya de Cancún el número de visitantes subió 35 por ciento. Es un museo que hicimos prácticamente desde sus cimientos, buscamos la conexión, pedimos piezas prestadas a otros museos, recuperamos piezas de Quintana Roo que estaban en otros Estados y estamos dejando un museo hermoso, funcional y al que los cancunenses valoran y quieren, subrayó.
Otro tema que quedó concluido y que sólo espera su publicación de la Declaratoria de Zona de Monumentos Históricos de Tihosuco, motivo de orgullo para el INAH y todos los que participaron en este proceso.
Sin embargo, aún hay mucho que realizar en cuanto a investigación y conservación en las iglesias de esa zona, como en Sabán y las dos de Sacalaca, que requieren atención pronta, reconoció.
De la misma manera, dijo que en Xkabal le hubiera gustado avanzar más, pero la situación es compleja por el tema del ejido, pero confía en que más adelante el trabajo del gobierno de Quintana Roo y del INAH permitirá avanzar.
Lo mismo sucede con el sitio arqueológico de Chakanbakán. Son sitios importantes en los que hay que seguir trabajando y arrojarán aportaciones importantes con la investigación, manifestó.
(Infoqroo)
